UN CUENTO PARA SERENA... Tres

Giane aprovechando las gotitas de rocío que había en las hojitas de los maceteros de la ventana, lavo su carita y se dispuso a esperar en la habitación... decidió sentarse en la almohada y desde ahí presentarse como es debido a la hermosa niña, pero, al darse cuenta que algo no estaba del todo bien, prefirio ocultarse debajo de ella e improvisar.

- Ja, ja, ja y por eso es que estoy aquí ahora, verdad? Comento Emma, fascinada de encontrarse en ese bello paraje del bosque. - Primero debo decir que te agradezco mucho que hayas arrullado a mi bebé, el pobre siempre se queda solito cuando salgo con papá y mamá, y es que es tan delicado que podría romperse en el camino, tu sabes, la porcelana es quebradiza, asi que lo dejo en casa por su seguridad. Ahora en cuanto al objeto que extraviaste, seguro que lo tengo! Siento mucho haberlo tomado! Recuerdo que ese día por andar correteando tras las lindas mariposas que volaban en el jardín de la casa comence a alejarme, me canse y comence a sentir sed, asi que continue mi andar hasta que encontre ese manantial de agua deliciosamente fresca. No vi a ninguna ranita, ni nada más que el agua cristalina... pero al sumergir mis manos para beber, algo llamo mi atención, una pequeñísima pieza plateada muy bella, como un taponcito... decorado con florecillas y ramitas de colores... Ah una pieza digna de estar entre mis tesoros! Pense, y por supuesto regrese a casa saltando de alegría... en el camino no recuerdo haber escuchado llorar a nadie, si pase por donde había un árbol muy hermoso de ramas que caían hasta el suelo, como el sol estaba tan cálido, me resguarde de su calor justo debajo de las melena de aquel árbol, recuerdo que abrace su tronco y le susurre: "Eres el melenudo más grandioso que he conocido jamás, tus ramas podría yo peinar sin cansarme... Gracias por tu sombra!". Después de un rato me aleje porque ya era hora de la cena y mamá se preocuparía por mi.

Giane mientras escuchaba el relato de Emma, con un movimiento mágico aparecio frente a ellas una mesita decorada bellamente con un mantel de finos hilitos tejidos que formaban figuritas de aves sosteniendo en sus piquitos ramitas y flores diminutas, una vajilla de hojitas de maple con deliciosos bocadines de frutas y té de limón, sirvio lentamente sin dejar de mirar a Emma con atención y le acerco una ración con amabilidad.

- Mmm, este té es una delicia! Dijo la niña, y continuó narrando... no sin antes saborear uno de los bocadines de fresa y piñon que también le gusto muchísimo. Ella no ponía jamás peros a lo que le ofrecían para comer, sus padres siempre decían que cada alimento era una bendición de la naturaleza, y que el cuerpo requería de cada uno de ellos para sus funciones. - Sabes Giane? La cajita que guarda mis tesoros es muy especial! Me la regalo mi abuelito, él es muy alegre y divertido, me cuenta cuentos y le gusta mucho leer. La caja contenía unos habanos que un amigo de mi abuelo le trajo hace ya mucho tiempo, él los fumaba antes, cuando era "tontuelillo"... él asi es como se describe cuando me platica de sus años de juventud, me explico que fumar es malísimo para nuestros pulmones, ya que ellos estan preparados para recibir oxígeno y no humo de ninguna especie, pero que él no lo había entendido así, hasta que un buen amigo se quedo dormido para siempre debido a que sus pulmones ya no le sirvieron... Cuánta alegría me da saber que mi abuelito ya se cuida mejor! Pues te decía, la cajita él la tuvo por muchos años y en ella guardaba las cartas de amor que le escribió la abuela, pero como las cartas ya eran más y la cajita no era suficiente para guardarlas, desocupo la cajita y la guardo pensando en mi... Él sabía que un día llegaría a su vida, me vio en un sueño, asi me lo dijo y yo por supuesto lo creo con todo mi corazón!. El día que cumpli 6 años, mi abuelito me obsequio la cajita, tenía unos listones de seda formando un moño sobre la tapa, dentro encontre un frasquito y una nota que decía: " Guarda una gota que emane de tus ojitos, por algo que realmente valga la pena recordar... en el futuro refrescaran tu memoria y te garantizo sonreirás"... Supe en ese momento que esa cajita sería especial para mi por siempre!...

Giane estaba tan absorta con lo que Emma le platicaba que no se dio cuenta que un mensaje se estaba emitiendo en el bosque, era un mensaje que transmitían los Ents, un mensaje que alertaba a todos los habitantes del bosque debido a que había comenzado un fuego en un paraje del Sur y estaba creciendo muy rápidamente... En el verano debido al calor abundante que abraza la zona boscosa, el riesgo de incendio es frecuente. En la zona sur habitan grandes familias de coníferas, estos pinos denominados árboles de fuego, deben su nombre al tipo de madera que poseen, rica en aceites o resinas que fácilmente pueden generar fuego si los rayos del sol son muy fuertes.

Una brisa agudizo los sentidos de Giane y entonces pudo escuchar con claridad el mensaje de sus amigos... "Laaameeentaaamooos iiinfooormaaar, maaareeeaaa rooojaaa aaavaaanzaaa cooopaaa aaa cooopaaa, naaadaaa queeedaaaraaa"... Inmediatamente le comento a Emma lo que esta sucediendo y acto seguido su luz brillo nuevamente con tal intensidad que cuando Emma abrio los ojos ya no estaban bajo las raíces de aquel árbol raro que jamás había visto en su vida... ahora sintio un denso humo penetrar por su nariz hacia sus pulmones y sintió picazón en sus ojos, ell abuelo tenía toda la razón, nuestros pulmones no estan hechos para recibir humo de ninguna especie.. cof, cof cof! Tosió de inmediato y en seguida sintión como Giane le cubría con un lienzo húmedo la cara... - Respira a través de él, estaremos bien! le dijo... Pudo ver árboles consumidos por el fuego, se sentía muchísimo calor, era casi sofocante de no ser por el lienzo que Giane le había dado...

El Hada dejo a Emma en un lugar seguro y de inmediato comenzo su labor de protección hacia su amado bosque. Cubrio de rocío toda la zona y con cantos amorosos pidio al sol que no abrazara tan cálidamente a sus amigos los pinos, y éste le obedecio ocultándose tras unas nubes que vinieron en ayuda también... El fuego muy molesto porque no lo dejaron alimentarse más, se quedo dormido no sin antes gritar y berrear, "Ya despertare, ya despertare... y entonces todo me comere!!!" ... Giane seguía cantando, suave, alegre y cariñosamente.

El área de bosque afectada quedo despoblada... Emma había escuchado alguna vez que "No hay mal que dure cien años", no sabía si esto era verdad pero tenía Fe, en poco tiempo estos parajes se llenaran de color y vivacidad.

Busco a Giane dirigiendo la mirada hacia lo alto de los pinos, donde los rayos del sol, suaves ahora, acariciaban las ramitas.





Continuará...